Ahorrar calefacción
Ahorrar no significa recortar y quedarnos sin aquello que necesitamos..
En muchos Institutos, colegios, Instituciones, Empresas, oficinas, autobuses, etc… debido a la situación que estamos se plantean hacer recortes para ahorrar y disminuir los gastos diarios que se producen.
Por ello, quisiera hacer una reflexión:
En los colegios e institutos, se produce la paradoja de que la calefacción de las aulas se encienden justo a la hora de que los alumnos entren a clase, y ésta no se apaga hasta el mediodía o incluso más tarde. Pero si recordamos cualquier invierno anterior, sucede lo mismo.
– Por la mañana a la hora de entrar en los centros, las aulas están congeladas porque la calefacción no se enciende hasta la entrada de los alumnos, –aunque algunas personas piensan que es un desperdicio tener la calefacción encendida si las aulas están vacías–.
– La otra situación paradójica, es que en la mayoría de los centros, la calefacción de las aulas, no se apaga hasta el mediodía, por no decir más tarde. Cuando en muchos de los centros a partir de las once de la mañana ya comienza a sentirse un calor sofocante, hasta incluso se abren las ventanas y algunos empiezan a quitarse ropa.
Pero ese argumento no se aplica para desconectar la calefacción, sino que muchas veces la calefacción se deja encendida aun estando las aulas vacías.
A manera de recomendación. Lo ideal seria encender la calefacción entre media y una hora antes de empezar las clases y apagarlas entre las 10h y 11h de la mañana, (o algo más tarde si es un día de mucho frío). De esta forma la calefacción únicamente estará encendida las horas necesarias, en lugar de las cinco o más horas como se hace hasta ahora. Si lo calculamos y comparamos, el tiempo que esta encendida, es mucho menor y estaremos igual de a gusto. Y es más, los alumnos tendrán más ganas de entrar a las aulas aunque sólo sea para estar confortables.
Claro, todo cambio conlleva un planteamiento y por tanto siempre habrá algo que nos impida hacer los cambios pertinentes, pero lo expuesto anteriormente es de lógica, (desde mi punto de vista).
Cómo mera recomendación, en el caso de que no se pueda organizar para que haya un responsable , de encenderla y apagarla, se puede instalar un reloj que programe las horas de funcionamiento de la calefacción, o bien encenderla cuando se entra por la mañana, pero sin que siga encendida hasta la hora que nos marchemos todos.
Alfonso Machado.